Blanco Inmaculado
Ellos son una comunidad santuario, un grupo de personas que huye de la sociedad consumista. Acostumbran a llevar el cabello largo y las ropas tan blancas como sus almas bañadas por la luz de la fe. Ellos se hacen llamar familia, pero, para la mayoría, La familia Fritz solo tiene un nombre: secta.
Todo se complica cuando, tras originarse un incendio en el caserío en el que viven, los bomberos hallan el cuerpo amordazado y sin vida de una chica de catorce años.
Al Departamento de Casos de la comisaría de la Ertzaintza de Irún no le quedará más remedio que lidiar con el hermetismo de sus miembros, y las estrictas normas que se niegan a quebrantar.
La oficial Lur de las Heras, llena de limitaciones a causa de una enfermedad que desde hace años la atormenta, contará con la ayuda de la patrullera Maddi Blasco para colaborar en la investigación. Dos mujeres sensibles que intentarán ganarse la confianza de los miembros de la comunidad para averiguar quién está detrás del homicidio. Dos mujeres que ignoran que la sangre de los Fritz volverá a derramarse, haciéndolas testigos de cómo se tambalean las férreas convicciones de la familia.