Las palabras calladas
La novela que narra el drama de los españoles exiliados en el campo de refugiados de Argèles sur mer.
Es febrero de 2019 y Mathieu está atrapado en Portbou, punto final de uno de los caminos del exilio republicano español antes de cruzar la frontera. A sus cincuenta y un años, ya no quiere ser ingeniero, pretende ser fotógrafo. Cámara en mano, se pasea por los andenes de la estación de tren cerrada por la tormenta en busca de esa imagen.
A través del objetivo ve una joven indigente que no se separa de su carrito y una mujer, con el pelo alborotado y aspecto descuidado, que toma un café en el bar de la estación. Él aún no lo sabe, pero la joven se llama Esther, o Jessica, y es una madre que enfermó por ser madre, estancada en la estación, como él, en su camino a Montpellier. Isabel, que así se llama la mujer del pelo alborotado, a quien acaban de desahuciar y viaja en la autocaravana que ha conseguido salvar de la quiebra, ahora aparcada por orden de la policía local, también viaja a Montpellier, para cumplir la promesa que le hizo al único hombre al que ha querido.
Ellos no lo saben, pero están unidos por esa delgada línea roja que ata las desgracias, las heroicidades y los amores durante las guerras; un hilo que une sus vidas truncadas con el entierro de una niña en el cementerio de Portbou en febrero de 1939.
Novela de personajes, tejida finamente con una estructura y un estilo magistrales, Las palabras calladas habla del camino de los exiliados, que escaparon para caer en nuevas trampas: la miseria, la enfermedad, el trabajo esclavo, hasta que vivir se les antojó «la más inmoral de las obligaciones».